Alegría o tristeza, tú eliges |
¿Cuántas
veces hemos dicho “estoy convencido/a de …” y ha acabado ocurriendo? Esto es la manifestación del poder mental que
atesoramos y que de manera involuntaria, la mayoría de las veces, accionamos
para que nuestros deseos o convicciones se hagan realidad en nuestras vidas.
Numerosos
estudios han demostrado que la autoconfianza, una convicción férrea de mis
capacidades de logro, es el factor singular más determinante del éxito. Empresarios,
deportistas, artistas, políticos, profesionales, todos ellos de éxito, suelen
tener un patrón común: La firme creencia en sus posibilidades y en la consecución
de sus objetivos, sin amedrentarse por las condiciones del entorno que les
rodea.
Construye tu triángulo mágico: Pensamiento-emoción-acción |
Te invito a
que hagas un experimento personal. Elige una situación personal o profesional,
que a día de hoy te esté dando dolor de cabeza o pienses que no va por buen
camino. Ahora elige un momento del día, en el cual tengas 15 minutos de
tranquilidad y, aplica unos sencillos ejemplos de respiración.
Una vez sientas que estás relajado/a, procura centrar tu atención en esa situación e imagina que se desarrolla de la manera que tu deseas. A continuación, siente que esa situación se está produciendo ya. El siguiente paso es actuar como si se hubiese logrado, con independencia de que aun no veas los cambios. Aplica está técnica durante los días que sean necesarios, hasta que la situación se revierta y deja que todo conspire a tu favor. Date la posibilidad de comprobar que la realidad puede ser modificada por ti, sin la colaboración de nadie más y piensa que no tienes nada que perder y mucho que ganar.
Artículo elaborado por Jobsherpa.
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